No Te Va Gustar retoma su camino musical con fuerza y estrena "En Llamas", una canción que marca el pulso del próximo disco del grupo, Florece en el Caos. El nuevo single irrumpe con una energía guitarrera y riffera que recupera la esencia más rockera de la banda, condensada en un estribillo potente y directo que anticipa una etapa renovada en su trayectoria. La pieza, firmada por Emiliano Brancciari, reúne intensidad, crudeza y vibración emocional en una propuesta que busca transmitir movimiento, fuego y cambio desde el primer compás. El tema fue grabado en el Estudio Elefante Blanco, en Montevideo, con la producción de Nico Cotton y la ingeniería de Carlos Imperatori, quienes ya habían acompañado a la banda en discos como Suenan las Alarmas, Otras Canciones y Luz. Este regreso al estudio encuentra a NTVG en pleno impulso creativo, apostando por un sonido más áspero y filoso, aunque siempre sostenido por el ADN melódico que define su identidad. Brancciari describe la canción como "muy para arriba", una declaración que refleja la intención del grupo de inaugurar su nuevo ciclo con un estallido sonoro cargado de vitalidad. El lanzamiento se acompaña de un videoclip dirigido por Jean Michel Cerf y Diego Robino, producido por Cimarrón, que se convierte en un hito tecnológico: es el primer proyecto realizado en el centro de producción virtual desarrollado por Grup Mediapro y Reducto Audiovisual. Gracias a esta innovadora infraestructura, el equipo filmó con fondos virtuales en pantallas LED y control total del entorno visual, lo que permitió experimentar con una estética dinámica y cinematográfica. El diseño de las pantallas se construyó digitalizando y animando obras de la artista argentina Mariana Villafañe, integradas al universo visual del clip. Este lanzamiento se da en un momento clave para la banda, que en mayo trasladó su cuartel general al barrio Parque Rodó, donde levantaron su propio estudio, diseñado para potenciar tanto el sonido como el proceso creativo. Con el espacio apenas terminado, NTVG se encerró a ensayar más de veinte canciones y, a comienzos de junio, inició junto a Cotton e Imperatori una intensa maratón de trabajo de tres semanas que dio forma a las diez piezas de Florece en el Caos, su primer álbum de estudio desde Luz (2021). El resultado es un disco cohesivo, actual y poderoso, que amplía los horizontes musicales del grupo y presenta letras más maduras, reflexivas y esperanzadoras, en sintonía con tiempos turbulentos. Florece en el Caos verá la luz próximamente y confirma que No Te Va Gustar sigue en evolución constante, fiel a ese espíritu inquieto que los ha consolidado como una de las bandas esenciales de la región.

Imagen de archivo del instrumento. El Telégrafo Después de más de quince años sin conocerse su paradero, fue localizado un piano de cola que perteneciera a la Sociedad Artística Amigos del Arte, institución sanducera que entre 1942 y comienzos de la década de 1960 impulsó la difusión de las artes, organizó conciertos y promovió la actividad coral. El instrumento, un Steinway serie B fabricado alrededor de 1909, acompañó buena parte de la vida cultural de Paysandú durante el siglo XX. Según informa el periódico sanducero El Telégrafo, el instrumento fue encontrado en el local de la casa de subastas Remate Sánchez. Si bien el piano presentaba cierto deterioro, los responsables del lugar notaron que se trataba de una pieza de gran calidad y poco común. El organero Mario d’Amico Holzmann, quien ha seguido de cerca el caso, explicó que el encargado del local, Ignacio Manzini, decidió inmediatamente poner el instrumento a disposición de las autoridades para su identificación. Así se confirmó que se trataba del piano de Amigos del Arte, que tras el cierre de la institución había circulado por distintas dependencias culturales del departamento antes de perderse su rastro. El objetivo ahora es restaurarlo y devolverlo a su lugar histórico, el Teatro Florencio Sánchez, donde durante décadas acompañó conciertos, coros y presentaciones de artistas nacionales e internacionales. D’Amico señaló que el caso evidencia una “deuda pendiente” con el patrimonio cultural sanducero. Recordó que desde los años 90 el instrumento sufrió abandono: primero fue trasladado a la UTU, donde permaneció en malas condiciones, con una pata rota y marcas sobre su teclado original de marfil. Posteriormente pasó a Casa de Cultura y, más tarde, desapareció durante 15 años. Para el experto, esta sucesión de descuidos refleja la falta de compromiso en la custodia de un bien patrimonial de la comunidad. “Por poco, Paysandú perdía para siempre un instrumento que forma parte de su historia musical”, afirmó. No obstante, destacó el rol de la Comisión de Patrimonio y la actitud de Manzini, quien renunció a cualquier interés económico para priorizar el valor cultural del hallazgo. Actualmente, el piano aguarda su restauración, con la expectativa de volver a sonar en el Teatro Florencio Sánchez. D’Amico apuntó que sería conveniente dotarlo de un sistema de transporte adecuado para evitar futuros daños y recordó que su recuperación permitiría contar con dos pianos de cola en Paysandú, un recurso valioso para la formación musical y la realización de conciertos a dos pianos.

El Festival de Huelva ha presentado dos nuevas cintas que compiten en la Sección Oficial y optan al Colón de Oro. Una de ellas es la uruguaya Un futuro brillante, una cinta de ciencia ficción sobre un mundo distópico. La otra es la mexicana Un mundo para mí, que narra el conflicto de una pareja con el nacimiento de su bebé intersexual. Según ha indicado el festival en una nota de prensa, la directora uruguaya Lucía Garibaldi ha presentado en Huelva su largometraje Un futuro brillante (Uruguay, Argentina, Alemania), con la participación de la premiada actriz Sofía Gala Castiglione encarnando a la protagonista, Elisa. Tras el éxito internacional de Los tiburones (Sundance, Bafici, San Sebastián), la joven directora uruguaya estrena en España en el festival su segunda película. Ciencia ficción, género "poco explotado" en Latinoamérica, que "habla más del presente que del futuro". De este modo, Elisa, la protagonista, es una de las últimas jóvenes escogidas para ir al Norte, una suerte de tierra prometida donde se está haciendo historia, pero al que se añade un pequeño detalle: "nadie vuelve de allí". Todo su entorno, incluso su querida madre, esperan con emoción su partida. Pero pronto Elisa se da cuenta de que no quiere partir y que con decirlo no es suficiente. La cinta ha sido premiada como mejor film de la sección Viewpoints del festival de TriBeCa y seleccionada en varios festivales, entre ellos Rusia y Guanajuato (México). Tal y como ha explicado Garibaldi, la historia le surgió mientras caminaba sola por una zona industrial de Uruguay. "Ahí me pregunté cómo sería la vida si yo fuese la última mujer joven en la Tierra", ha confesado. Desde ese punto de partida, la cineasta construyó una película en un mundo distópico, "pero en el que están presentes los temas que me interesan: la rebeldía, las expectativas de la juventud, las desigualdades, entre otros muchos". En este sentido, la directora uruguaya ha asegurado que cree haber conseguido "un tono auténtico, sin imitar a nadie y buscando trasladar un mensaje". Garibaldi ha confesado que le gustaría que en sus próximos proyectos "lo político esté aún más presente". Sobre el género elegido, el de ciencia ficción, ha señalado que "no es tan raro y poco explorado en Iberoamérica, lo que sucede es que en Europa quizá se interesen más por otro tipo de historias narradas en las películas, probablemente elementos más dramáticos". Lucía Garibaldi escribió y dirigió su primer largometraje, Los tiburones (Uruguay, Argentina y España, 2019). Se estrenó en el Festival de Cine de Sundance 2019, en el cual obtuvo el premio a la mejor dirección. La película fue seleccionada en más de 50 festivales internacionales y obtuvo más de diez premios internacionales.
*Europa Press*

La modelo vietnamita L?i Mai Hoa se ha hecho viral tras una caída en las escaleras de la pasarela durante la Semana Internacional de la Moda Aquafina Vietnam 2025. La joven resbaló y cayó al suelo. Sin embargo, reaccionó de inmediato, actuando acorde a la máxima de que "el show debe continuar". En el suelo, la modelo adoptó una postura sensual y elegante, para luego reincorporarse con gracia y seguir desfilando. Su comportamiento captó la atención del público y se difundió rápidamente en las redes sociales. L?i Mai Hoa, ganadora de Vietnam's Next Top Model 2025, comentó sobre el episodio y afirmó estar "agradecida por los primeros tropiezos". Agradeció a la estilista LinhThu Ha y dijo que las lecciones aprendidas en el reality show contribuyeron a su presencia escénica. La modelo ganó la versión vietnamita de "America's Next Top Model" en octubre. El video recibió elogios en el mundo de la moda, incluyendo la edición vietnamita de la revista "Harper's Bazaar". Modelos como Naomi Campbell y Jean Shafiroff comentaron la publicación. L?i Mai Hoa declaró que su intención es consolidar su carrera y emprender nuevos proyectos en la industria. Imagen obtenida de la cuenta de Instagram @floralamia_

El Museo de Arte de Keelung, en Taiwán, se ha visto envuelto en una situación inusual luego de que un voluntario, en un intento de ser útil, destruyera una pieza de arte valiosa. El incidente involucró la obra Sintaxis invertida 16, del artista Chen Sung-chi. La obra, que consistía en un espejo cubierto de polvo montado sobre una tabla de madera con una mancha, era una representación de la conciencia cultural de la clase media, según el artista. Lo particular de la pieza era que la capa de polvo no había sido colocada por el artista, sino que se había acumulado a lo largo de 40 años, formando parte integral de la escultura. El voluntario, al parecer, no reconoció el valor artístico del polvo acumulado. Viendo el espejo como un objeto que necesitaba limpieza, procedió a frotarlo con un trozo de papel higiénico, causando daños irreparables antes de que el personal del museo pudiera detenerlo. Cheng Ting-ching, subdirector del Museo de Arte de Keelung, declaró que tras el incidente se celebraron reuniones de emergencia. "Actualmente se está estudiando una posible compensación para el artista," aseguró. Incidentes como este, en los que obras de arte son confundidas con basura u objetos que necesitan limpieza, no son del todo infrecuentes. Se han registrado casos similares en Italia, Países Bajos y Alemania, donde piezas artísticas o instalaciones completas han terminado siendo desechadas.
Crédito fotográfico: Imagen ilustrativa

El sábado 29 de noviembre, a las 20:00 horas, el Teatro Lavalleja de Minas será escenario de la 29ª entrega de los Premios de la Cultura Uruguaya – Morosoli 2025, organizados por la Fundación Lolita Rubial. La ceremonia constituye una de las instancias más significativas del calendario cultural del país, convocando cada año a referentes del arte, la ciencia y diversas áreas del quehacer nacional. En esta edición se homenajeará, mediante la estatuilla Morosoli, a personalidades e instituciones que, por sus aportes, se consideran merecedoras de esta distinción. Además, se otorgará la Medalla Morosoli en plata vieja a un grupo de figuras del movimiento cultural fallecidas en los últimos dos años, cuyo legado se reconoce como trascendental y notorio para la vida cultural del Uruguay. Para la selección de los galardonados, la Fundación cuenta con un Consejo Asesor integrado por más de 100 personalidades provenientes de diversos campos intelectuales, científicos y artísticos. Este cuerpo colegiado es el encargado de propiciar y respaldar las premiaciones, consolidando un proceso que combina trayectoria, impacto y compromiso con la cultura nacional. La iniciativa constituye una apuesta anual y colectiva desde la ciudad cultural de las sierras, que reafirma el reconocimiento de la comunidad minuana al trabajo realizado en todo el país. Con ello, los premios contribuyen a fortalecer las bases de una sociedad del conocimiento, promoviendo la educación, la investigación y la innovación como herramientas centrales para el desarrollo del Uruguay del futuro. Asimismo, los Morosoli impulsan una cultura de y para la paz, sostenida en valores como la democracia, el republicanismo, la libertad, la tolerancia, la solidaridad y el respeto irrestricto por las diferencias. Desde esa perspectiva, proyectan —dentro y fuera de fronteras— la identidad de un Uruguay cultural que se nutre de la diversidad de expresiones y miradas que conforman su vida artística y social.

El pequeño municipio de Paguero, ubicado en lo profundo del departamento de Artigas a orillas del arroyo Cuaró Chico, es el escenario de una historia que ha conmovido a la comunidad local y trascendido fronteras a través de las redes sociales. En la Escuela Rural No 11, el maestro Rodrigo Martínez se ha convertido en un fenómeno viral tras un gesto de generosidad hacia uno de sus alumnos. Según informa el medio local Clicregonal, Martínez decidió regalar su bicicleta personal a Alan Pereira, un estudiante de sexto año. Desde principios de año, Alan había mostrado un especial interés por la bicicleta del maestro, un entusiasmo que no pasó desapercibido. Martínez, consciente de este anhelo, decidió convertirlo en una oportunidad de apoyo y reconocimiento. Con el final de los cursos acercándose, el maestro le entregó su velocípedo. Este regalo fue acompañado de una carta fechada ayer, cuyo contenido se ha viralizado en redes sociales. En la misiva, el maestro destaca la perseverancia de Alan y expresa su confianza en su futuro. Utilizando el acto de pedalear como una metáfora del esfuerzo constante, Martínez enfatiza que el verdadero regalo no es la bicicleta en sí, sino el mensaje que transmite. La carta dice textualmente: "Hola campeón, Hoy quiero regalarte algo más que una bicicleta. Quiero regalarte un mensaje: vos podés llegar lejos, mucho más lejos de lo que imaginás. Esta bicicleta me acompañó en caminos difíciles, en días de cansancio y también en momentos de alegría. Cada vez que pedaleé aprendí algo. Cuando uno sigue, aunque cueste, siempre llega más lejos. Por eso te la doy a vos. Porque cada día veo cómo intentás, cómo te esforzás, cómo aprendés y cómo nunca te rendís. Vos tenés una fuerza especial de esas que hacen que una persona crezca y logre cosas increíbles. Cada vez que subas a esta bici, quiero que recuerdes algo: Siempre podés dar un pedaleo más, incluso cuando parezca difícil. Cada pedaleo es un paso hacia tus sueños. En cada enseñanza que te dejo, sigo acompañándote. Una parte de mí queda con vos. Confío en vos. Creo en vos. Y estoy seguro de que vas a llegar muy lejos en la vida. Disfrutala, cuidala y sobre todo, seguí avanzando. El mundo tiene muchos caminos esperándote. Con todo cariño, tu maestro: Rodrigo Martínez" El gesto del maestro ha sido ampliamente interpretado como una poderosa muestra del vínculo que puede establecerse entre educadores y estudiantes, y como un recordatorio de la relevancia del acompañamiento emocional en el entorno escolar. En redes sociales, se ha desatado una ola de apoyo hacia el maestro y buenos deseos para el estudiante, quien el próximo año comenzará su educación secundaria.

Del 6 de enero al 31 de marzo de 2026, el Museo de Arte Contemporáneo Atchugarry (MACA) acogerá Lucio Fontana: un genio de dos mundos, la primera exposición dedicada al influyente artista ítalo-argentino en territorio uruguayo. Con la curaduría del reconocido especialista Luca Massimo Barbero, la muestra propone un recorrido exhaustivo por las múltiples etapas y lenguajes que atravesaron la carrera de Fontana (1899–1968), uno de los grandes pioneros del arte moderno. La exposición reúne 72 piezas —entre cerámicas, esculturas, dibujos y telas— que permiten apreciar desde sus primeras obras escultóricas en Rosario de Santa Fe y Milán, hasta sus célebres Concetti spaziali, con los emblemáticos tagli (tajos) y buchi (agujeros), en los que la materia se convierte en un canal hacia el vacío, la luz y el infinito. Barbero define la muestra como “un viaje de ida y vuelta entre Europa y Sudamérica” y como una reflexión sobre “la formación y el método” que rigieron el trabajo de Fontana, desde sus orígenes hasta su radical formulación del Espacialismo, movimiento que fundó en Buenos Aires en los años 40 con el Manifiesto Blanco. En él, el artista propuso una concepción del arte que integraba espacio, ciencia y tecnología, anticipando lenguajes como el arte conceptual, performativo e incluso digital. Lucio Fontana, nacido en Argentina de padres italianos, dividió su vida y obra entre los dos continentes, creando un corpus artístico que desafió los límites convencionales entre pintura, escultura y arquitectura. Su regreso a Buenos Aires en 1940 fue clave en la gestación de un pensamiento estético que colocaba al espacio como materia y al vacío como forma. De ahí surgirían no solo sus ambientes inmersivos, sino también una visión del arte como acto, evento y energía en movimiento. Sus obras se conservan hoy en los principales museos del mundo —MoMA (Nueva York), Tate Modern (Londres), Centre Pompidou (París), Museo del Novecento (Milán)— y sus Attese (esperas) siguen siendo referencia obligada en los debates sobre modernidad y espiritualidad en el arte. El MACA refuerza así su misión de conectar América Latina con Europa y de albergar proyectos curatoriales de alcance internacional. La exposición contará con un catálogo ilustrado, coeditado por Allemandi y MACA, con textos inéditos de Barbero y el respaldo de la Fondazione Lucio Fontana. La muestra no solo revisita los momentos canónicos del artista, sino que invita a mirar con nuevos ojos su dimensión latinoamericana: el joven escultor formado en el taller de su padre en Rosario, el investigador que convirtió el horno cerámico en laboratorio escultórico, el pensador que transformó la tela en apertura filosófica hacia el infinito. Con Lucio Fontana: un genio de dos mundos, el MACA propone una experiencia que, más allá de la contemplación, interroga la relación entre materia y espíritu, entre forma y energía, entre el arte y lo absoluto.

La Cuba que describe Leonardo Padura en su más reciente novela, Morir en la arena, es una nación sumida en el apagón constante, la inflación desenfrenada y una precariedad cotidiana que ya no se oculta ni en la literatura. Para el autor, galardonado con el Premio Princesa de Asturias en 2015, la solución no está en medidas paliativas, sino en una transformación de fondo: “Hace falta una cirugía profunda en la economía cubana”. Durante su paso por Panamá para presentar el libro, Padura habló sin ambages sobre el colapso económico que atraviesa la isla, al que muchos expertos llaman ya una “policrisis”. “Eso va a provocar cambios en la sociedad y cambios en la política. Hasta que eso no ocurra, no sé cómo puede haber cambios importantes que permitan una forma diferente de vivir la cotidianidad”, afirmó a EFE. Uno de los personajes de su novela lo resume de forma descarnada: “No se vislumbraba solución, y por eso tanta gente se había ido y, como pintaban las cosas, no pararían de hacerlo”. Libertad de expresión, censura y “libros piratas” Padura vive y escribe en La Habana, a contracorriente de otros autores e intelectuales que han optado o se han visto forzados al exilio. Aunque admite que en Cuba no existe “toda la libertad de expresión que debería haber”, asegura que explota “toda la libertad que necesito para expresarme”. Esa independencia se sostiene en parte gracias a su vínculo de larga data con la editorial española Tusquets. Desde hace cuatro novelas, sus libros ya no se editan en Cuba, oficialmente por la falta de papel, aunque el propio autor sugiere que también hay una falta de voluntad editorial. Aun así, sus obras circulan dentro del país mediante copias digitales no oficiales y envíos desde el extranjero. “El sistema editorial cubano está prácticamente detenido”, apunta, lo que ha reducido el alcance doméstico de muchas voces críticas. Quedarse para contar Frente a la decisión de millones de cubanos de abandonar el país —más de 1,2 millones entre 2022 y 2024, según estimaciones— Padura defiende su permanencia en la isla como una necesidad creativa y ética. “Yo creo que la solución no siempre es irse”, sostiene. “Para mí, ha sido quedarme para poder estar cerca de esa realidad, poder palparla”. A través de sus novelas, especialmente las protagonizadas por el detective Mario Conde, Padura retrata las tensiones, frustraciones y contradicciones de una sociedad que cambia más de lo que parece. “Aunque la estructura político-económica es la misma desde hace décadas, la sociedad sí cambia”, dice. Y menciona como ejemplo la irrupción de internet y la posibilidad —hoy vigente— de salir del país si se posee un pasaporte en regla. Erotismo y religión: una sociedad de puertas abiertas Como es habitual en su narrativa, Morir en la arena también aborda aspectos más íntimos de la vida cubana. Uno de sus personajes afirma que “el ejercicio que parecía mantener a flote el país” era el sexo. Para Padura, esa naturalidad responde a múltiples factores culturales, entre ellos, el mestizaje, el clima y la religión afrocubana. “Es una religión que no tiene el concepto del pecado, por lo tanto, te deja mucha más libertad”, explica. Ese modo de vivir “hacia fuera” impregna las relaciones personales y el comportamiento social en la isla. “La cultura del Caribe es una cultura de puertas abiertas”, reflexiona, una idea que contrasta con el encierro material y simbólico que experimenta la Cuba actual. El libro Una dramática historia real que cuenta magistralmente cincuenta años de un país.“Padura ya es el mejor escritor contemporáneo de su país, y uno de los más importantes de Hispanoamérica” José Manuel Martín Medem, El Mundo.“Un nuevo libro de Padura es una forma de entender la realidad cubana” The New Yorker. La vida de Rodolfo siempre ha estado marcada por el trauma de la guerra de Angola, pero sobre todo por el asesinato de su padre a manos de su hermano Geni, apodado Caballo Loco. Ahora, recién jubilado, Rodolfo se encuentra con que recobra la intimidad inesperada de su cuñada Nora, viejo amor de juventud, pero también con una noticia inquietante: van a excarcelar a su hermano parricida, aquejado de una enfermedad incurable, y no tiene otro destino que la casa familiar. En esa tensa espera, y durante poco más de una semana, se reavivarán viejos rencores, secretos familiares que creían enterrados, y en especial los detalles del sangriento asesinato que cambió la vida de todos en la familia. Solo la llegada de la hija de Rodolfo, y la intervención de un joven triunfador en una Habana desahuciada, darán el último y desesperado apoyo a Rodolfo. Un relato dramático, una novela magistral, que cuenta cincuenta años de historia de un país. Crédito fotográfico: Tusquets

En 2020, el maestro indio Ranjitsinh Disale, de una aldea remota de Maharashtra, fue galardonado con el Global Teacher Prize. Disale tomó la decisión de repartir la mitad del premio, USD 500.000, entre los otros finalistas. En 2009 llegó a la Escuela Primaria Zilla Parishad en Paritewadi, donde encontró un edificio en ruinas, vacas dentro del aula y una comunidad que no enviaba a las niñas a la escuela. La mayoría abandonaban los estudios por casamientos infantiles o trabajo rural. "Pensaban que las niñas solo estaban hechas para casarse", relató Disale. En 2010 enfrentó su primer gran desafío: impidió el matrimonio de una de sus alumnas adolescentes con un hombre de 30 años. Habló con el padre, acudió a la policía y logró frenar la boda. Hacer respetar el derecho a la educación de las niñas se convirtió en el eje central de su tarea. Detectó que muchas niñas hablaban kannada, no maratí, idioma oficial de la escuela, y aprendió su lengua materna, traduciendo todo el plan de estudios. Para convencer a las familias, comenzó a visitarlas en los campos de cultivo, dialogando en su idioma y desmontando prejuicios. Con una laptop que le compró su padre, Disale creó materiales audiovisuales, canciones y tareas para enseñar en clase y fuera de ella. Implementó códigos QR en los libros de texto, permitiendo el acceso a contenidos educativos desde los celulares, incluso sin internet constante. "Ahora no hay matrimonios adolescentes en el pueblo y la asistencia de las niñas a la escuela es del 100%", informó la Fundación Varkey. La escuela fue reconocida como la mejor del distrito y el 85% de sus estudiantes obtuvieron calificaciones sobresalientes. Muchas de las egresadas ingresaron a la universidad. Durante la ceremonia virtual del Global Teacher Prize 2020, Disale anunció que compartiría el 50% del millón de dólares con los otros nueve finalistas. "Al compartir el premio, enseñás al mundo la importancia de dar", destacó Sunny Varkey, fundador del galardón. Además, destinó parte del dinero a construir una red de docentes innovadores en India. Peter Tabichi, ganador keniano de la edición anterior, donó el 80% de su salario para ayudar a estudiantes pobres. Disale impulsó el programa "Cruzando Fronteras", que emparejó a más de 19.000 estudiantes de ocho países en conflicto (India y Pakistán, Palestina e Israel, Estados Unidos y Corea del Norte, entre otros), fomentando el diálogo y la paz intercultural. Gracias a plataformas como Microsoft Educator Community, dio clases virtuales a más de 85.000 estudiantes en 83 países, con actividades, excursiones digitales e intercambios pedagógicos. El impacto de su trabajo fue destacado por Microsoft, y Satya Nadella —su CEO— lo mencionó en su libro Hit Refresh como una de las mayores historias de transformación educativa en la India.